¡Que vivan los crotos!
Un día del año 1930, José Américo Ghezzi (Bepo), picapedrero anarquista sin trabajo, abandona su pueblo y hasta 1955 no regresa. Durante 25 años camina si otro rumbo que el trazado por las vías del ferrocarril, sumándose al silencioso mundo de los "crotos" en el que se encuentra al "francés", maestro de vida que lo marcó para siempre. En su ...